En 2014 pasé una temporada en Ciudad de México por cuestiones laborales, fueron casi dos meses de duro trabajo y apenas tiempo libre, en los pocos días que tuve exploré lo que estuvo a mi alcance y te lo voy a contar, pero, sin duda, lo mejor de esta experiencia fue poder tratar con un montón de gente maravillosa.
Ciudad de México es una de las ciudades más pobladas del planeta, con unos 21 millones de habitantes, lo que supone casi la mitad de la población española en una sola ciudad, consta de 1485 km2 y se encuentra a una altitud media de 2240 msnm. Con estos datos te puedes hacer una idea de la magnitud y la diversidad del lugar.
Mi alojamiento estaba en el Paseo de la Reforma, que es la principal avenida de la ciudad, tiene casi 15 km de largo y, por tanto, pasa por distintos barrios, en ella se encuentran algunos de los monumentos más conocidos, como es el Ángel de la Independencia y los principales edificios de la zona financiera.
Un dato curioso, y que me gustó mucho, es que los domingos por la mañana se cortaba el tráfico de la avenida y las familias acudían a pasear en bicicleta o con patines, un contraste total con el denso tráfico del resto de la semana.
Afortunadamente, yo estaba en la parte que pasa por la zona centro, una zona segura y a un paseo a pie de algunos de los principales puntos de interés. Así que, en cuanto tuve un día libre me eché a andar.
Te propongo el siguiente recorrido:
Empezando desde aquí:
En la Avenida Juárez, se encuentra la Alameda Central, un parque público que data de 1592, siendo así el más antiguo de México y de América. Alberga puestos de artesanías, fuentes y algunos monumentos.
Hemiciclo a Juárez, Alameda Central.
Una vez pasado el parque, está el Palacio de Bellas Artes, primer museo de arte de México, y mi edificio preferido de la ciudad. Consta de exposición permanente con grandes murales que relatan la historia de México y de interesantes exposiciones temporales. Además, el edificio es también la sede de la Orquesta Sinfónica Nacional, la Compañía Nacional de Ópera y de la Compañía Nacional de Danza.
Justo enfrente, haciendo esquina con la calle Madero, se encuentra otro edificio emblemático de la ciudad, la Torre Latinoamericana, de la que ya te habíamos hablado aquí. Desde su mirador hay muy buenas vistas.
Continuando por la calle Madero, una popular zona comercial, se llega a la Plaza de la Constitución, conocida como El Zócalo, es la segunda plaza más grande del mundo, rodeada por la Catedral Metropolitana y el Palacio Nacional, entre otros edificios. De camino, una parada interesante es el Palacio de Cultura Banamex, fundado en un palacio barroco en el que se presentan exposiciones temporales con temáticas vinculadas a la historia del país y cuya entrada es gratuita.
Para terminar, acércate hasta la Plaza Garibaldi, pide a los Mariachis tu ranchera favorita y toma una degustación en el Museo del Tequila y el Mezcal.
*Todas las fotografías son nuestras